Llegas a tu casa tras un largo día de trabajo y necesitas un descanso, nada mejor que reclinarte en un sillón relax, conseguirás confort y bienestar en el día a día. Pero ¿cómo elegir el mejor sillón relax?
A todos nos gusta llegar a casa y tener las mayores comodidades posibles para descansar y relajarnos, por lo tanto, no puede faltar en tu casa un buen sillón relax. De ahí que te demos estos consejos para elegir el mejor.
Es muy común ir a grandes superficies en busca de nuestro sillón relax. Cuando vemos lo que nos ofrecen no sabemos por cuál decantarnos, ya que no conocemos los distintos tipos de sillones que hay, ni materiales, ni cuál realmente satisfará nuestras necesidades.
Los sillones relax van a aportarte lo que realmente necesitas para descansar al final del día. Poseen una serie de peculiaridades que no ofrecen otros sofás y el nivel de descanso es mucho mayor. Te presentamos a continuación algunos consejos prácticos para escoger el más adecuado.
¿Qué es un sillón relax?
Necesitamos descansar ya que supone la recuperación del organismo, tanto a nivel físico como mental, ante un esfuerzo del día a día. La falta de descanso puede ocasionar trastornos de diferentes tipos. Por eso, es importante invertir en nuestra salud y en buenos artículos para el descanso.
El sillón relax es un sillón con condiciones especiales para descanso. Condiciones o características como la posibilidad de reclinar el cuerpo y las piernas o, simplemente, utilizarlo como asiento para apoyar los pies en el suelo.
Por supuesto, existen muchos modelos, desde algunos que son hechos en tela, como otros de cuero, de mayor o menor dimensión de espacio para sentarse y apoyar los brazos, con reposacabezas o sin ellos, levantapersonas, de gravedad 0…etc.
Importante: escoger un buen material
A la hora de elegir el sillón relax, no hay que pensar en el más barato, ya que el material del que esté hecho puede deteriorarse fácilmente, sufrir desgaste, hundirse o perder el color. Invierte y conseguirás un producto que ofrezca prosperidad a largo plazo y un buen descanso.
Un buen material es aquel que no se rompe, que tiene buena textura, que no se desgasta la superficie y que muestra resistencia al paso del tiempo o que tiene un buen comportamiento con nuestro peso. Dentro del grupo de buenos materiales pueden destacarse los dos siguientes:
- Cuero: sin duda alguna, este material es garantía de calidad, con él uno puede asegurarse que el sillón posee las mejores cualidades del mercado. Inconvenientes: es más costoso, es frio en invierno y caluroso en verano.
- Tapizado en tela: es sin duda la opción más extendida por su versatilidad, amplios y variados diseños y, sobre todo, su gama anti-manchas.
- Gomaespuma de poliuretano: que el asiento esté blando y no sea duro dependerá del material; de este modo, hay que asegurarse que está hecho con gomaespuma de poliuretano de alta densidad, recuerda que el hecho de que sea duro no quiere decir que tenga una densidad alta, la cuestión es que pueda soportar nuestro peso muchos años.
- Muelles ensacados: Los asientos de muelles ensacados están cada vez más en auge, se amoldan bien a tu fisionomía, van normalmente acolchados en viscoelástica o hr de alta densidad, son frescos ya que es un material muy transpirable. Sin duda una buena elección.
Lo agradecerás: que sea sillón reclinable
Un buen sillón es aquel que, como hemos dicho, te garantiza un buen descanso. Los que son de baja calidad generan incomodidad, perdida de tiempo, dinero y, además, se convierte en un incordio el poder relajarse. Es preferible que el sofá posea todas las comodidades posibles.
- La importancia de ser reclinable: un sillón que se reclina hacia atrás te permite estirar el cuerpo y estar reclinado, esto permite que tu cuerpo pueda estar cómodo.
- El reposapiés: un elemento imprescindible, ya que te permite estirar las piernas. Eso sí, es importante probar el sofá antes de comprarlo, comprobando que tu cuerpo se ajusta a las medidas del sillón.
- Gravedad 0: Novedad en cuento a la opción de reclinarse, esta característica permite elevar más las piernas que el tronco permitiendo mejor riego sanguíneo y un descanso formidable.
- Reclinable manual o Reclinable con motor: sin duda ambas son buenas opciones, si bien es cierto que el que lleva motor es mucho más confortable la sensación de estar llevándote hacia el descanso. Hay que huir de opciones sospechosamente baratas tanto en el manual como con el del motor. Por eso busca tu sillón relax en un establecimiento de confianza, que sea especialista y garantice el producto.
El sillón no se trata de ser un asiento donde tumbarse, sino donde reclinarse y poder ver la televisión o leer.
No lo pases por alto: comprueba el mecanismo interno
No se debe pasar por alto el siguiente aspecto: comprobación de la estructura interna. De nuevo, volvemos al tema de invertir en buena calidad y no acudir a recursos baratos que lo que generan es incomodidad.
Los mecanismo internos para que el sofá se recline hay que tenerlos en cuenta y saber si funcionan bien o si pueden dar problemas. Han existido casos en los que, con el paso del tiempo, no se puede reclinar bien el sofá porque fallan tornillos o se oxida el metal.
La mayoría de estos sillones poseen sistemas de engranajes de metal y otros soportes de madera que garantizan el soporte de las personas.
Por tanto, el principal consejo a tener en cuenta es que antes de comprar hay que asegurarse de que funciona bien y que tendrá una larga vida; además, es importante que la tienda ofrezca una garantía en el caso de que en poco tiempo no funcione adecuadamente.